Si, lo sé... bah no lo sé...

Me gustan más las películas con finales felices que las que tienen descenlaces tristes. Tal vez me gusta pensar que a pesar de que todo está mal, puede tener un final feliz, todo puede cambiar.
Lo realmente extraño de esto, es que a pesar que se que tengo que cambiar ciertas actitudes que no me han conducido a nada, no lo hago.
¿Por qué nos cuesta tanto cambiar? Hablo desde lo más simple... siempre regresas por la misma calle, siempre elegis el mismo super en donde hacer las compras, es más ... hay veces en las que todo es tan repetitivo que sentís que ya lo viviste... y tengo una noticia ¡¡¡ya lo vivisteee!!!! estás en una rueda sin fin...

No me gustan los domingos.
Como con sal a pesar de que se lo mal que hace.
Cuando estoy mal pongo música brasilera para bailar.
Odio "La boda de mi mejor amigo" porque quiero que tenga otro final, siempre la veo, pero el final no cambia...
Cuando tengo algo que decidir pongo "piloto automático" y limpio a fondo escuchando música.
Difícilmente me enamoro, y cuando lo hago es de alguien que no me conviene, seguro.
No me canso de probar labiales nuevos, y hasta tengo un ranking de los mejores.

Sí, lo sé ... estoy llena de contradicciones, miedos inexplicables y dudas existenciales... y lo peor es que ¡¡ aún no salió la pastilla que las cure!! jaja